Recientemente se publicaban en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL) los nombres de los tres de los mejores médicos residentes que acabaron la especialidad de Medicina de Familia en la región castellano-leonesa. Las tres son mujeres y entre ellas se encuentra la Dra. Cristina Gutiérrez Lora, formada en Medina del Campo y que pertenece a la SEMG, en concreto, al Grupo de Infecciosas de nuestra sociedad científica.
- ¿Cuál es tu vinculación con la SEMG?
Soy socia de la SEMG desde primero. Pertenezco al grupo de trabajo de Enfermedades Infecciosas. Y he asistido a todos los congresos, jornadas regionales y cursos que he podido en estos cuatro años, ya que siempre son muy interesantes.
- ¿Qué crees que diferencia y aporta la SEMG en comparación con otras sociedades científicas (SSCC)?
Creo que la SEMG es una sociedad muy activa, llena de gente muy trabajadora. Dentro de las SSCC es la que más tiene en cuenta a los residentes y jóvenes médicos. Solicitan en todas las ocasiones nuestra opinión, colaboración y participación a todos los niveles, lo cual es muy motivador.
Además, integra mejor que ninguna al equipo completo de Atención Primaria, tenido siempre presente a enfermería.
Considero, en definitiva, que la SEMG es una sociedad de muy alto nivel científico, que trabaja con humildad por la Medicina de Familia y permite la participación y trabajo de todos sus miembros, haciéndonos sentir parte de una familia.
- ¿Cómo recibiste la noticia de que eras una de las mejores MIR de Castilla y León?
Me enteré de la noticia a través de mi jefa de estudios, que me llamó a la consulta. Lo supieron todos mis compañeros antes que yo, porque estaba publicado, pero no lo había leído. Si no me hubiera llamado, me habría enterado al leer las felicitaciones por el WhatsApp.
- ¿Qué/quiénes crees que han contribuido a que lo consigas?
Por supuesto, ha sido gracias a todos mis formadores durante la residencia. Pero en especial, y principalmente, a mi tutor, Miguel Ángel García Rodríguez que, desde el primer día, se ha entregado al mil por mil en mi formación, apoyándome en lo personal y académico siempre. Le debo a él que haya despertado en mí el interés por la investigación y el amor profundo a la Medicina de Familia.
También tengo mucho que agradecer a otras dos personas que, sin ser mis tutores directos, me han acompañado y guiado en toda la residencia, y que son para mi ejemplo junto a Miguel Ángel, de dedicación y esfuerzo por esta profesión: son Javier Gamarra Ortiz y Mari Fe Sánchez Flores.
Y, por último, han contribuido inmensamente mis compañeros de residencia, que tanto han trabajado conmigo día a día en estos años. Creo que este “reconocimiento” también es para ellos y para la formación que recibimos en Medicina de Familia y Comunitaria en hospitales y centros de salud más pequeños, como es en nuestro caso, en Medina del Campo, que nada tiene que envidiar a otros centros más grandes.
5 ¿Tenías claro desde un principio que querías ser médico de familia? ¿Por qué?
Sí. Creo que es la especialidad más completa que existe, además de la más cercana al paciente. Ve a la persona en su totalidad, sumando al conocimiento de la enfermedad, el bienestar social y comunitario del individuo. La que mejor representa, en mi opinión, lo que es ser médico realmente. No hay más que ver que los otros especialistas siempre les dicen a los pacientes: “vaya usted a su MÉDICO, para que le continúe el seguimiento”.
- ¿Cómo valoras la situación actual de la Medicina de Familia? ¿Cómo crees que se podría mejorar?
Creo que la Medicina de Familia está muy desprestigiada actualmente y que la sobrecarga asistencial a la que está sometida y la precariedad laboral, no permite el desarrollo óptimo de nuestra profesión.
Lo primero y fundamental que considero que habría que hacer, para mejorar la situación actual, es que los propios médicos de familia valorásemos la especialidad como se debe, como el pilar fundamental y estructurador de todo el sistema sanitario. Cuando nosotros mismos empecemos realmente a creernos que sin los médicos de familia el sistema no funciona y que nuestra especialidad requiere un conocimiento médico-científico amplísimo y de muy alto nivel (que pocas especialidades requieren), entonces la Medicina de Familia se recolocará en el lugar que le pertenece.