ENTREVISTA A DAVID MARTÍNEZ, MENCIÓN ESPECIAL A LA COMUNICACIÓN DE ESTUDIANTES DEL CONGRESO SEMG24
El estigma y discriminación del VIH existente en el sistema sanitario es causa del desconocimiento
Entrevistamos a David Martínez González, enlace oficial para organizaciones médicas y de pacientes de la Federación Española de Asociaciones de Estudiantes de Medicina para la Cooperación Internacional (IFMSA Spain) que consiguió la mención especial a la Comunicación de Estudiantes en el 30º Congreso Nacional de Medicina General y de Familia por ‘Eliminación del estigma y la discriminación del VIH en la Atención Primaria’.
¿Por qué decidiste hacer una comunicación sobre el estigma del VIH en el sistema sanitario?
Mi motivación por desarrollar una comunicación sobre el estigma del VIH en el sistema sanitario es doble. Por una parte, como activista por los derechos y la salud sexual y reproductiva, considero que es fundamental que sigamos generando evidencia científica en esta área, así como utilizando los espacios relacionados con la medicina en el que convergen profesionales, como fue el caso del 30º Congreso Nacional de la SEMG para abordar cuestiones más sociales y humanas en el ámbito de la salud. Por otro lado, en línea con la visión y misión de IFMSA-Spain, consideramos prioritario abordar el estigma y la discriminación de trato asociado al VIH.
¿Hay diferencias entre la discriminación entre Atención Primaria y Hospitalaria? ¿A qué crees que es debido?
El estigma y la discriminación asociado al VIH está presente en todos los niveles sanitarios, sin embargo, se puede manifestar de diferentes maneras y formas. Por ejemplo, acuerdo con el informe del estudio Experiencia de estigma de las personas con el VIH en España publicado en abril de 2024 por el Ministerio de Sanidad, CESIDA y la Universidad de Alcalá, en los servicios de Atención Primaria (AP) la actitud estigmatizante encontrada más frecuentemente fue la inclusión del estado serológico en los informes cuando el VIH no tenía relación con la atención prestada; por su lado, en la atención hospitalaria se refieren que las experiencias de estigma más frecuentes fueron la evitación del contacto físico, la recomendación de no tener relaciones sexuales por tener el VIH y la divulgación del estado serológico sin el consentimiento de la persona.
Además, a la hora de abordar las diferencias es importante tener en cuenta el tipo de manejo de los pacientes que realizan cada uno de los niveles de atención: mientras que la AP siempre tiene una visión holística, la atención hospitalaria puede estar más orientada a abordar las cuestiones de salud de manera individualizada. Esto puede hacer que las actitudes discriminatorias sean más frecuentes y visibles en AP.
¿Cuáles son las principales causas de esa discriminación?
En la propia definición de "estigma" puede encontrarse la principal causa: el desconocimiento.
Resulta curioso cómo, a pesar de la extensa formación con la que contamos los profesionales sanitarios, así como la inmensa evidencia científica y literatura existente en relación al VIH y al SIDA, siguen existiendo conceptos erróneos, la utilización del lenguaje estigmatizante o actitudes totalmente discriminatorias hacia las personas que conviven con la infección por VIH.
Desde IFMSA-Spain hemos desarrollado ciertas investigaciones para analizar cómo es la formación que recibimos los futuros profesionales de la salud en materia de Infecciones de Transmisión Sexual, como el artículo ‘Análisis de la formación en materia de infecciones de transmisión sexual en el grado de medicina en las universidades españolas de medicina en las que está presente IFMSA Spain’, publicado en la Revista Multidisciplinar del SIDA, donde destacamos que el 22.3% de los estudiantes de medicina no sabía diferencia entre ETS e ITS; el 32.6% utilizaban el término contagio, en lugar de transmisión; y el 61.8% consideraban el temario desactualizado y no adaptado a las necesidades poblacionales actuales.
¿Y las consecuencias?
Las consecuencias del estigma y la discriminación son múltiples, pero centrándonos en el área sanitaria existen numerosos estudios que muestran cómo suponen la principal barrera de adherencia al tratamiento y el acceso a los sistemas de salud. En relación a la salud mental, se observa como el estigma y la discriminación es uno de los principales detonantes de trastornos emocionales, situaciones de ansiedad y trastornos depresivos en las personas que conviven con la infección por VIH. En otras áreas, las personas que conviven con VIH reportan rechazo por parte de familiares, amigos y parejas; comentarios discriminatorios; agresiones verbales y físicas; exclusión de actividades sociales y reuniones; etc. En conclusión, el estigma y la discriminación afectan directamente a la calidad de vida de las personas que la sufren, además de suponer un atentado directo contra los derechos humanos.
Una vez detectado el problema ¿cómo podrían eliminarse esas barreras?
Eliminar el estigma y la discriminación pasa por un compromiso e involucración de todas las partes interesadas a todos los niveles: desde medidas políticas que aseguren la inversión financiera en materia de formación y concienciación; hasta el compromiso de los profesionales sanitarios, pasando por la participación de la sociedad en actividades de concienciación. Centrándome en el área en el que trabajamos desde IFMSA-Spain, es decir, la educación médica universitaria, planteamos diversas medidas que podrían ayudar a solventar la problemática:
- Actualización de los planes formativos y currículos de estudio, eliminando conceptos erróneos, terminología estigmatizante, etc.
- Involucrar a los pacientes en la elaboración de los planes formativos para asegurar que los futuros profesionales dispongan de las herramientas y conocimientos necesarios para abordar sus necesidades.
- Aumentar el contenido teórico-práctico que asegure el dotar de herramientas comunicativas a los futuros profesionales sanitarios.
- Involucrar al estudiantado en el diseño e implementación de los planes de estudio, para conocer nuestras necesidades.
¿Qué otros colectivos vulnerables podrían beneficiarse de estas estrategias y cómo?
El colectivo LGTBQIA+ ha sido considerado clásicamente como "culpable" del aumento de casos del VIH, así como de otras ITS. Asimismo, esto hace que las personas cishetero queden en el olvido en relación a las ITS. Como he mencionado antes, el estigma es causa del desconocimiento y son múltiples los colectivos que son estigmatizados y discriminados en el ámbito sanitario: personas con problemas de salud mental; colectivo LGTBQIA+; mujeres; personas racializadas; etc. En ocasiones, estos colectivos vulnerables encuentran dificultades en el sistema sanitario (ya sea en la propia atención o en los trámites administrativos) lo que hace que su acceso a la salud pueda verse vulnerado.
Además del abordaje médico, ¿qué otros aspectos se deberían tener en cuenta ante esta problemática y cómo?
Es importante tener en cuenta todos los aspectos que rodean a las personas que conviven con la infección por el VIH: social, laboral, etc. Por poner un ejemplo, las personas VIH mayores están viendo retiradas sus prestaciones por incapacidad o prestaciones no contributivas, de manera que se están quedando sin ingresos financieros, lo que les deja en situación de pobreza, aumentando aún más sus vulnerabilidades (noticia relacionada aquí). En otros casos se les ha negado el poder contratar seguros médicos, se han denegado el visado para entrar a otros países debidos a la infección por VIH, etc.
No es una cuestión puramente médica, necesita ser abordada desde todos los ámbitos.