Grupo de Trabajo de Residentes

La ecografía es una técnica con la que podemos obtener mucha información del paciente de manera inocua, instantánea, dinámica y a la cabecera del mismo si disponemos de una formación adecuada y bien estructurada. El uso de esta técnica en el contexto clínico del Médico de Atención Primaria (entre otros especialistas) supone en muchas ocasiones una mejoría del enfoque diagnóstico y terapéutico de muy diversas patologías. Al tenerlo integrado como un elemento diagnóstico más del que disponemos en nuestro centro de trabajo podremos sacarle el máximo rendimiento posible evitando derivaciones innecesarias a otros niveles asistenciales o acelerando las mismas cuando se requiera, con el objetivo de buscar el máximo beneficio posible para el paciente, que en muchas ocasiones puede suponer salvarle la vida.

El hecho de poder aprender esta técnica durante la residencia supone integrar y correlacionar los conocimientos en ecografía con el resto de conocimiento en las demás áreas que debe desarrollar un médico de familia, facilitando el aprendizaje y su utilización razonada. Es indiscutible que se está convirtiendo, si no lo es ya, en un elemento clave en la práctica clínica. Se trata de una herramienta tan completa que cuanto antes se aprenda, mejor, porque exige formación y práctica continuadas.